Capítulo #09

La voz de Nick, nos hiso salir de nuestro trance, me puse rápidamente de pie y Joe hiso lo mismo. Nos miramos nuevamente pero ahora de una manera tímida.
— ¿Sabían que los hemos estado buscando casi por media hora, si no es que mas?—dijo Nick, en tono autoritario. Joe limpio rápidamente sus ojos y yo me abrase a mi misma. El tiempo hacia de las suyas, y el viento comenzaba a soplar mas fuerte.
—Calma Nick, no es para tanto, vi luz, salí y me encontré a Joe aquí tomando aire…
—Si Nick, estaba tomando aire, fue un gran concierto el que hubo hoy…—siguió Joe, Nick nos veía incrédulo.
—Lo dice, quien parece no haber disfrutado todo el concierto… ¡Vaya!—miro a Joe y después me miro a mi—. Vamos Alex, hace frio, puedes enfermarte. — Yo asentí y Nick pasó sus brazos a mí alrededor, intentando protegerme del fuerte viento. Mire a Joe, quien se quedo ahí parado, le esboce una media sonrisa—. Y Joe, tú y yo hablaremos luego…—dijo Nick mirándolo inquisitivamente.

//Joe//
Este momento había sido raro, pareciera que mi mirada no hubiera querido separarse de la suya… fue realmente extraño, ya que horas antes, nos habíamos peleado e insultado y hace unos minutos, Alex estaba aquí consolándome.
Nick llego e interrumpió… algo tenia su mirada que me había hecho perder mi sentido común… algo.
El viento empezó a soplar mas fuerte su cabello volaba y despedía un delicioso olor a fresa.
«¡Oh vamos Joe! Estas hablando de la tonta de Alex… recuérdalo.»
— ¿Vendrás o te quedaras ahí parado como un tempano de hielo?
—Cállate Alex, que no ves que ya voy.
—Tonto…
—Loca…
Me miro retadoramente mientras Nick reía, después desapareció por aquella puerta y yo sonreí…

Atravesé la puerta y ahí estaban ya mis padres, les hice una seña con la mano y camine hacia el camerino a recoger mis cosas, ya que por lo que escuche y vi, iríamos a cenar todos juntos, no tenia ganas, tenia que hablarle a Camilla, tenia que darme una explicación congruente y no una estupidez…. O también debería dejar que pasara el tiempo, tal vez lo que necesitábamos era un tiempo para nosotros solos y pensar bien las cosas. Si, es lo que haría, no le hablaría, me esperaría a que se le bajara su estúpido coraje y ya después el tiempo dirá.

Me subí a la camioneta con mis hermanos y mis padres, mientras que en otro auto iban Alex y sus papás.
Durante el trayecto Kevin y Nick me miraban pero no decían nada.
— ¿Qué tanto me ven?
— ¿Que fue lo que paso durante Turn Right, Joe?
—Nada Kevin—respondí desviando mi mirada hacia la calle.
—Joe, te conocemos y tu no lloras tan fácil… ¿fue por camilla?
—Nick…—planeaba desmentirlo, pero tenían razón, me conocían demasiado—. Si, si fue por ella. —respondí con un hilo de voz. Dolía.
— ¿Qué fue lo que paso?
—Cortamos… o eso es lo que creo.
—Oh, lo siento mucho—fue lo único que respondió Kevin
—Pues yo no….—dijo Nick sincero— Bueno si, por ti, pero por ella no. Sinceramente Joe, no era para ti y tenia una mala vibra…
—Nick, lo dices porque nunca te callo bien.
—Fuera de eso Joe, Nick tiene razón, era rara…
—Como digan. —gire los ojos y me recargue en el respaldo del asiento.
Volví a perder mi mirada en aquella obscura calle. Durante todo el trayecto no hacia nada más que pensar en Camilla. En mi mente no había nada mas, ni siquiera el pensar que este había sido el ultimo concierto de la gira, para empezar por fin un descanso.

La camioneta se detuvo frente un lindo restaurante. Todos bajamos y fuimos directo a la mesa que ya teníamos reservada. Al entrar vi que ya habían llegado nuestros acompañantes. Volvimos a saludar y nos sentamos. Como era costumbre durante el día, me toco sentarme frente a la “no tan odiosa ya”… Alex.

//Alex//
“Una cena de bienvenida”, fue lo que dijo mi padre antes de subir al auto. ¿Una bienvenida? No entendía, ya habíamos tenido un “desayuno de bienvenida” ¿no? Me chocaban tantas formalidades para alguien que ya conocemos. Después de esperar varios minutos llego la familia Jonas. Joe de nuevo se sentó frente a mí. Estaba nuevamente serio.

Empezaron a platicar todos con todos. Trajeron la cena y siguieron charlando, yo me sentía totalmente fuera de lugar aquí, así que no hablaba, solo oía, observaba y jugaba con mi cena.
—Gran presentación chicos, lo hacen muy bien. —Esperen un momento ¡¿Qué Fue lo que acabo de escuchar?! ¿Mi padre felicitándolos por su presentación?, ese comentario hiso que casi me ahogara al beber mi refresco.
— ¿Te encuentras bien?— pregunto Nick, mientras apretaba mi mano, el sabia lo que me ocurría.
—Fue de las mejores presentaciones que he visto chicos, en verdad. —volvió a decir mi padre, evitando así, que la atención fuera para mi.
—Alex ¿enserio te encuentras bien?
Voltee a ver a Nick, Solo asentí, haciéndole creer que todo estaba bien.
—Si no hubiera sido por ti John y por los teléfonos que me proporcionaste, mis hijos no hubieran llegado tan rápido a la cima.

Haber, haber… ¿Qué? El… ¿El había seguido el contacto con ellos y aparte les dio números telefónicos de “contactos” suyos?
Empuñe mi mano y suspire haciendo un esfuerzo sobrehumano, para que las lágrimas no me traicionaran y cayeran por mis mejillas. Me pare de la silla y empecé a caminar cuando mi padre me hablo. Parecería irrespetuosa, pero le daba la espalda.
— ¿A dónde vas Alex?
—Afuera…
— ¿A que?
—Necesito aire—dije después de un gran suspiro. Me daba coraje, Él sabia porque estaba así, y le gustaba restregármelo en la cara siempre que tenía oportunidad.
En cuanto puse un pie fuera de aquel lugar. Las lágrimas de tristeza y coraje empezaron a brotar. Camine hacia la banqueta y me senté entre 2 autos que estaban ahí estacionados. Abrase mis piernas y escondí mi cabeza entre ellas. Las lágrimas seguían saliendo… ¿Por qué hacia esto? A veces llegaba a pensar que no me quería, que le gustaba hacerme la vida imposible, que no me quería ver feliz… no me quería ver triunfar… se me hacia algo tan egoísta.
Empecé a calmarme, ya tenia un buen rato aquí afuera y “no quería que mis lindos padres se preocuparan por mi”. Limpie mis lagrimas y me echaba un poco de aire, para que lo rojo de mis ojos se desvaneciera. Me puse de pie, tome una gran bocanada de aire y entre de nuevo.
— ¿Enserio te encuentras bien?—pregunto en voz baja.
—Si Nick, estoy muy bien.

Después de pelear por quien pagaría la cena nos fuimos a casa. Al entrar cada quien se fue a su habitación. Menos mi Papá y Paul, ya que irían a un bar, con unos amigos en común que tenían.
Entre a mi habitación, avente mis cosas en la esquina y me puse algo cómodo. Vi todo apagado, así que Salí con cuidado de mi habitación y subí a mi “lugar secreto”.

Al entrar, una gran paz me abordo. Este era el único lugar donde podía ser yo misma. Me acerque al gran ventanal y me senté en el, observando la linda luna que a pesar de lo nublado, se veía deslumbrante.
Un gran suspiro salió de mí en forma de lamento y los ojos me empezaron a arder.
— ¿Puedo pasar?
¿Podría pasar algo más en este día? Definitivamente era un día de locos… debería ser broma.